RAYMOND V. FRANZ, nacido en 1922, fue hijo de unos padres que habían sido parte del movimiento "estudiantes de la Biblia" (más tarde conocidos como "testigos de Jehová") desde los días de la I Guerra Mundial. Además de sus padres, 3 de sus abuelos estaban afiliados a la "Watch Tower", así como 4 tíos... 1 hermano de su madre y 3 hermanos de su padre (incluyendo a Frederick Franz que llegó a ser más tarde 4 presidente de la Sociedad). El más joven de los 3 hermanos del padre y su mujer, abandonaron el grupo después de la fallida predicción que éstos realizaron para 1925, y no volvieron a afiliarse más.
Fue en 1938, (Raymond tenía 16 años), cuando él y sus 2 hermanos mayores se convirtieron en miembros activos de los testigos. Uno de estos hermanos más adelante fue invitado a participar en el campo misional, asistiendo a la Escuela Bíblica de Galaad, y sirviendo durante un tiempo en Brasil.
Después de que Raymond se graduara en el instituto en 1940, él entró a formar parte del servicio Precursor y durante los siguientes 40 años, dedicó por completo su vida a presentar el mensaje de la organización Watch Tower. Él sirvió como Precursor Especial, Superintendente de Circuito, y misionero en las islas del Caribe. Fue designado supervisor de la sucursal de Puerto Rico (donde conoció y se casó con su mujer Cynthia) y más tarde en la República Dominicana, durante un período en el que se apreciaban grandes disturbios entre las facciones políticas y la obra de los Testigos estaba prohibida por las autoridades.
Sirviendo en la Sede Central en Betel
En 1964, Nathan Knorr, entonces tercer presidente de la Sociedad, pidió que Raymond formara parte de la plantilla de la sede internacional en Brooklyn.
Una vez aceptado el cargo, Ray regresó a la República Dominicana para enseñar a un sustituto, y al siguiente a o (1965) él y Cinthia dejaron su servicio en el Caribe y se unieron a la familia Betel en New York. Se le asignó para trabajar en el departamento de redacción y pronto se le pidió que confeccionara un diccionario bíblico para los testigos de Jehová. Para este proyecto, él colaboró con otras 3 ó 4 personas de la sede y pronto crearon lo que sería el Diccionario Bíblico más importante en la comprensión de la doctrina comprendida por la Sociedad, al que denominaron Ayuda para entender la Biblia. (1969)
Con la excepción de unos pequeños cambios y la integración de numerosos dibujos e ilustraciones, éste trabajo está siendo aún publicado por la organización Watch Tower en formato de 2 volúmenes bajo el título de Perspicacia para Comprender las Escrituras, aún cuando la mayoría de sus principales escritores no siguen asociados, bien por expulsión o por haber sido reemplazados en sus puestos de responsabilidad.
Del Cuerpo Gobernante a la "Crisis de conciencia"
Tras la finalización del proyecto del libro Ayuda, Ray (como le llaman la mayoría) fué nombrado miembro del Cuerpo Gobernante (en la actualidad, este grupo está compuesto por 12 miembros).
Fue en el transcurso de los siguientes 9 años, cuando se produjo en Ray la "crisis de conciencia", como resultado de su experiencia en la dirección organizacional del grupo, al observar una gran división existente entre el adepto de a pie y los altos dirigentes, dedicados a establecer pautas y normas de obligado cumplimiento. Aunque trató de luchar en esta responsabilidad para modificar algunos hábitos de la cúpula, se encontró de frente con la mayoría del grupo. Poco a poco se fue percibiendo de la gran diferencia que existía entre el proceder de la Sociedad Watch Tower y los cristianos del primer siglo que inspiraron el título de su libro en el que cuenta su historia. En 1980, a la edad de 58 años, fue obligado a dimitir del Cuerpo Gobernante y dejar Bethel. El y Cinthia se trasladaron a Alabama.
El siguiente año, después de más de 40 años de dedicación al servicio, Ray fue expulsado, atribuyéndo como mal cometido, el comer en un restaurante con una persona desasociada: su patrón y amigo, Peter Gregerson.
Debido al hecho de haber sido miembro del Cuerpo Gobernante, así como sobrino de el, en ese momento Presidente de la Sociedad Watch Tower, Frederick Franz, la separación de Raymond de la organización causó una conmoción entre los testigos de Jehová, y fue foco de atención no solo por los propios Testigos, sino por los medios de comunicación.
Desde la muerte del Juez Rutherford en 1942 en adelante, el tío de Ray, Frederick Franz, fué, en efecto, utilizado como gran Teólogo y erudito de la organización por su predecesor, Nathan Knorr, hasta la propia muerte de Knorr en 1976. Durante estos años es "hecho sabido" que toda la "nueva verdad" originada por los testigos de Jehová vino de Fred Franz, así como la razón, detrás de la gran mayoría de políticas relacionadas con la expulsión practicada dentro de sus filas.
Frederick Franz fue, en realidad, el único traductor de la Traducción del Nuevo Mundo de la Biblia. Después de la marcha de Ray de Brooklyn, el escribió cartas a su tío en 3 diferentes ocasiones. Frederick Franz murió el 22 de Diciembre de 1992, a la edad de 99, sin responder en ningún momento a ninguno de los comunicados de su sobrino.
Vida después de La Watch Tower
Mucha gente que han leído "Crisis de conciencia" se pregunta ahora cómo les ha ido en la vida a Ray y Cynthia desde la conmoción sucedida en Betel durante 1980-1981, (algunos miembros prominentes de la organización fueron expulsado durante ese tiempo, por decir en voz alta lo que la mayoría tenía en su pensamiento).
Posteriormente a la expulsión de Franz, comenzaron a circular rumores entre los testigos sobre la formación de movimientos disidentes que iban a seguir promoviendo el estudio y la investigación de la Biblia. Esto, en cierto modo fue verdad, pero no de la manera que la Sociedad Watch Tower ha insinuado en sus publicaciones y algunos Testigos han creído.
Raymond Franz ha hecho consistentemente evidente su aversión a formar ningún tipo de "nueva organización".
Es por eso que, con relación al tema, él frecuentemente ha contestado citando del libro de Daniel Taylor, "The Myth of Certainty", que dice:
Los objetivos fundamentales de todas las instituciones y subculturas es de conservación propia. Sin embargo, el eje central en el plan de Dios para los seres humanos es preservar la fe, no preservar instituciones religiosas particulares. Por supuesto, no debemos esperar que aquellos que dirigen las instituciones sean sensibles a la diferencia. Dios no necesita gente, iglesia, denominación, credo o organización particular que se acople a su propósito. El hará uso de aquellos, con todos sus defectos y errores, que estén dispuestos a ser usados, pero dejará para ellos mismos a aquellos que trabajen para sus propios fines. Sin embargo, cuestionar las instituciones, es sinónimo, para muchos, de atacar a Dios, algo que no se tolera por mucho más tiempo... En realidad, se protegen a ellos mismos, su punto de vista del mundo, y su sentido de la seguridad. La Institución religiosa les ha dado a ellos sentido en su vida y en muchos casos, carreras. Cualquiera que es identificado como una amenaza para estas cosas es una amenaza en sí mismo. Esta amenaza se conoce a menudo, o se suprime incluso antes de que aparezca, con poder... Las instituciones expresan su poder más claramente enunciando, interpretando y haciendo cumplir las reglas de la subcultura. Cada institución tiene sus reglas y formas de imponerlas o hacerlas cumplir, algunas claramente expresadas, otras menos expresadas pero igualmente reales."
Reflexionando en este punto de vista, Ray siente que una gran lección para aprender y aplicar, es ver el Cristianismo como generador de una hermandad, no de un sistema organizacional.
La gente pregunta a menudo cosas tales como: ¿Cómo vive ahora Ray? ¿Cómo les va a Ray y Cynthia? ¿Cuáles son sus puntos de vista desde que dejaron a los testigos? ¿Como ve él la amonestación bíblica de Hebreos 10:24,25 la cual aconseja a los Cristianos a reunirse para incitarse al amor y las obras excelentes?.
Como los lectores de "Crisis de Conciencia" saben, Ray pasó los primeros años después de dejar Betel en el empleo de su buen amigo, Peter Gregerson, que era copropietario de una pequeña cadena de supermercados en Alabama. Por aquellos entonces Peter había experimentado su propia "crisis de conciencia" y tomó la decisión de desasociarse de los Testigos de Jehová, aunque no hizo una aparición externa de oposición contra la organización. Sin embargo, fue con Peter con quien Ray tuvo el infame almuerzo que proporcionaría la base de su expulsión, aún cuando por esas fechas no estaba prohibido por la política organizada asociarse con personas disociadas. Poco después "The Watch Tower" cambió completamente su política en relación con el permiso de asociación con personas desasociadas y Ray fue retroactivamente expulsado por violación de la nueva política. Más tarde, Peter y Ray, cuando pasaban un día por el restaurante se refirieron a él como "La escena del crimen". La revista Time contó la historia (22 de Febrero de 1982) y ésto se transformó con un gran volumen de correspondencia que Ray no pudo manejar.
Parece que la mejor solución era escribir un libro que cualquiera pudiera leerlo y que daría más cobertura de lo sucedido que a través de la correspondencia.
El nuevo libro en circulación, "Crisis de Conciencia", fue el resultado.
Desde que fuera por primera vez publicado el libro ha alcanzado una circulación de 60.000 ejemplares en todo el mundo; en 7 lenguas con otras traducciones en proceso. Mucha gente que lo ha leído ha escrito cartas expresando que la información presentada en su libro les ha permitido finalmente sentirse libres pasando de un estado de gran incertidumbre a un estado de paz en sus corazones.
¿Cómo les va a Cynthia y Ray hoy?
Tienen una bonita casa de madera, en una zona rural a unas 30 millas de Atlanta, Georgia. Generosidad espontánea e inesperada de otra gente, jugó un papel importante en hacer esto posible. Peter Gregerson les ofreció trabajo en su tienda y permitió a los Franzs aparcar gratis su rulot en su propiedad durante los primeros 5 años después de llegar a Alabama, ésto permitió a Ray ahorrar una considerable suma de su salario en aquellos entonces.
En 1985, aún viviendo en Alabama pero a punto de mudarse a Georgia, una carta inesperada llegó de una extraña. Era de una señora que vivía en Australia, que había recibido una copia de "Crisis de Conciencia" de un amigo de Sudáfrica. Junto a la carta había 2 cheques por cantidades de 4 cifras, uno para Edward Dunlap, (antiguo registrador de Galaad que fue expulsado en la sacudida de 1980) y su mujer Betty, y el otro cheque para los Franzs.
Hicieron mención a esta amable persona de su propósito de mudarse a Georgia para lo que envió otro cheque 4 veces más que el primero.
Con éstos regalos y con lo que Ray había ahorrado más un préstamo personal de uno de los parientes de Cynthia, fueron capaces de comprar una tierra y empezaron a construir una casa. Un antiguo testigo de Misissipi, Ray Phillips, que había sido toda su vida contratista, amablemente se encargó de la construcción y después fueron capaces de arreglarselas solos para terminar el proyecto.
Construyendo el garage
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| Vivienda donde habita Ray Franz y esposa
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Los rumores
Ray encuentra una cierta ironía en la costumbre de los testigos, al referirse a ellos como que, están "en la verdad" teniendo en cuenta algunos de los marcados rumores que ellos han hecho circular sobre él son mentira, como por ejemplo, el mencionado anteriormente sobre "la formación de su propia religión". Incluso, en los Estados Unidos y en algunos países europeos se ha rumoreado que él se retractó en su postura y que había pedido su restauración.
Otra historia repetida en diversas ocasiones ha tenido que ver con la supuesta muerte en un accidente de coche con llamadas de teléfono desde Inglaterra y otros países preguntando por la realidad de tal hecho. Ray animó a los investigadores a que comprobaran sus fuentes diciendo que si el rumor era cierto, él ciertamente quería ser informado. Tom Cabeen (antiguo supervisor del taller de imprenta del Watch Tower), le envió una camiseta con el dicho de Mark Twain, impreso en él:
Los informes de mi muerte han sido grandemente exagerados"
A su vez existen rumores de que Ray se ha enriquecido gracias a la publicación de sus libros. Él encuentra ésto casi divertido en algunos aspectos, ya que desde que terminó su trabajo en el negocio del supermercado de Gregerson en 1986, sus ingresos anuales (incluyendo la Seguridad Social) han sido menos de la mitad de lo que ganaba como un empleado. En 9 de los 10 últimos años, su ingreso anual ha estado en realidad por debajo de la cifra del "umbral de pobreza" establecido por el Gobierno. Sin embargo, él y Cynthia encuentran que todas sus necesidades están cubiertas, debido en parte a la generosidad de la gente y al aprendizaje de algunos poderosos hábitos para economizar.
Tal y como dice Ray "cualquier austeridad inicial ha sido sustituida por simple frugalidad".
Reconoce los largos años que él y Cynthia dedicaron completamente al servicio de los Testigos de Jehová como una forma natural de vida y no en lo más mínimo como algo desagradable o restrictivo.
Ray Franz y Cynthia son anfitriones que reciben visitantes de muchos países. La forma cálida y nada pretenciosa de Cynthia, hace que la gente se sienta bienvenida y a gusto en casa. Afortunadamente ella es muy buena cocinera. Este año han tenido visitantes, no sólo de Estados Unidos sino de España, Inglaterra, Francia, Puerto Rico e Italia. Siguen llegando cartas de todo el mundo y aunque Ray intenta contestar todas, la correspondencia se acumula durante meses.
Sin hijos, Ray y Cynthia encuentran gran placer en su perro, "Muchacho", mitad Border Colle y mitad "quién sabe qué". Pasear con Muchacho a través de los senderos de los alrededores y jugar con él supone diariamente un buen ejercicio y recreo.
Un poco como el "pequeño cordero" en la historia de Nathan o David (2 Samuel 12:1-7), que llegó a ser como una hija y un miembro de la familia para el pobre hombre de la historia, así Muchacho ha llegado a ser una especie de niño sustituto que aporta esa clase de afecto incondicional y compañía que un animal puede dar.
Como tantos otros que estuvieron una vez en la organización de los testigos, los Franzs dicen que no han sentido la necesidad de hacerse miembros de ninguna otra denominación de Iglesia para rellenar sus necesidades espirituales. Más que hacer una transición en serie a nuevas creencias, ellos simplemente leen la Sagrada Escritura para progresivamente alimentar su entendimiento, tratando de hacer un sincero esfuerzo para no ser persuadidos por ideas preconcebidas. No promulgan ciertas creencias, ni ponen etiquetas tales como "ortodoxa" o "no ortodoxa" a creencias que no son claramente "cuestiones de salvación".
Cada semana quedan con sus amigos en su casa o en la casa de alguno de ellos de la zona donde viven y estudian la Biblia como lo hacían los cristianos en el siglo primero. En particular aprecian ocasiones de celebración de la cena del Señor con otra gente. Dicen que están muy impresionados con el gran significado que ahora tiene la ocasión que es mucho más que en la estéril ceremonia en la que solían participar en el pasado.
A veces van a las asambleas de la B.R.C.I. para tener la oportunidad de ver a muchos de los allegados.
A la pregunta: ¿Regresaría.......?
Alguna gente se pregunta si ¿Existe la posibilidad de que Ray Franz vuelva alguna vez a los Testigos de Jehová?.
Para quien se cuestione su vuelta en caso de alguna reforma importante dentro de los Testigos, él les responde así:
No hay posible vuelta a la organización Watch Tower, incluso no hay una remota posibilidad de que cambien e incluso si lo hiciesen, no tengo interés en volver a formar parte de ese sistema religioso. Los cimientos religiosos de la organización están seriamente da ados y cambios cosméticos no alterarán la fundación."
"El Espíritu que ha sido desarrollado por un énfasis intenso y constante en la organización es insano y hace distraer la atención sobre el hijo de Dios y del Espíritu Santo, haciendo que los miembros dirijan su atención en gran parte al elemento humano más que a su propio espíritu. El atribuir derechos y privilegios a un sistema humano, los cuales descansan ó pertenecen sólo y exclusivamente al hijo de Dios, es probablemente el error más grande y serio.
"En segundo lugar, hay un apartar del individuo de un verdadero sentido de la relación personal con Dios y Cristo, la Usurpación del propio ejercicio de la conciencia individual como consecuencia de la imposición de innumerables reglas y regulaciones del origen puramente humano. Esto produce una situación como la descrita en Mateo 15:9, preocupantemente parecido a los Fariseos en el siglo primero. No podían hacer los cambios fundamentales que necesitaban sin dejar la organización en la que estaban. El cristianismo es, o debería ser una hermandad, no una sociedad estructurada sujeta a una administración centralizada."
Ray comenta que siempre podría regocijarse encontrándose con gente y hablando con gente en una atmósfera de libertad pero que no está interesado en formar parte de algún sistema religioso institucionalizado. Él lo expresa del siguiente modo:
"En mi propio caso, no tengo ningún deseo de formar parte de ninguna confesión. Esto no es consecuencia de una renuencia a fraternizar con la gente, o de un interés exagerado por la independencia; tampoco es debido a un sentido complaciente de autosuficiencia, o a una aversión farisaica de arriesgarme a ser "contaminado" por la asociación con aquéllos entre cuyas creencias existen algunas que yo considero equivocadas. En general, creo que soy quizás menos proclive a juzgar a los miembros de las diferentes confesiones, de lo que a menudo ellos son con respecto a confesiones que no son la suya. Mi sentimiento de apertura no es hacia los sistemas a los que se adhiere la gente, sino hacia ellos como personal."
"El que yo permanezca libre de ataduras confesionales, pues, no es indicativo de una perspectiva puramente negativa o pesimista, sino que es debido en primera instancia a factores positivos. Es porque creo que puedo prestar un mayor servicio, un mejor servicio a Dios, a Cristo y a mis semejantes, si no me ato a ningún sistema, sea una sencilla confesión o un "establishment" religioso multi-confesional en conjunto. Honestamente considero que eso, más que un adelanto es un estorbo. No me convencen los argumentos de que se puede hacer más siendo parte de un sistema que separado del mismo. El registro bíblico muestra que los profetas operaban esencialmente fuera del "sistema", como Juan el Bautista y el propio Cristo. Y no creo que entre los cristianos de tiempos apostólicos hubiera algo parecido a los "establishment" o sistemas religiosos actuales. El poder de Dios y de su Hijo seguro que supera cualquier poder derivado que uno pudiese obtener por medio de la pertenencia a una organización, incluso aunque la organización fuese, como lo son algunas organizaciones religiosas, de tamaño descomunal. Creo que ese tipo de poder es enormemente ilusorio, ya que lleva consigo sus propias condiciones limitadoras y restrictivas en forma de requisitos para la pertenencia, condiciones previas que debilitan al individuo como persona, más bien que fortalecerlo. Y yo creo que es lo que somos como personas lo que en última instancia tendrá el mayor significado en nuestros esfuerzos para ser de provecho a otros."
"En mi situación actual aprecio sentirme completamente libre para expresar interés en todas y cada una de las personas, sean de alguna confesión o de ninguna, sin estar predispuesto a favor de algunas frente a las demás-y sin que sientan que estoy intentado promover los intereses de alguna confesión. No hay duda de que la mayor parte de mis contactos es con personas que estaban o todavía están afiliados con los Testigos de Jehová. No obstante, esto no es debido a un menor interés en otras personas. Es simplemente el modo natural en que se han desarrollado las cosas. Es desde donde han llegado la mayoría de los mensajes, al igual que la mayor parte de las declaraciones de necesidad. Reconozco, por supuesto, que quizás puedo prestar un mayor servicio a personas que son o que han sido Testigos, ya que mis antecedentes me permiten entender sus circunstancias y puntos de vista más claramente de lo que podría en el caso de los que tienen antecedentes diferentes. No obstante, mi esposa y yo hemos invitado a comer en casa a varias parejas de entre nuestros vecinos, personas con antecedentes confesionales diferentes, con el fin de conocernos mejor. Y en todas las ocasiones nuestras conversaciones incluyeron asuntos espirituales, no porque planeásemos introducirlos, sino por el interés normal de nuestros vecinos. Un hombre católico romano de Italia nos ha visitado y ha comido con nosotros unas cuantas veces, y siempre he encontrado sus visitas refrescantes, debido a su clara preocupación por las personas y a su interés personal en las Escrituras. Estoy a disposición de todas estas personas, y creo que cualquiera de ellos, si tuviesen la necesidad, se sentiría libre de llamarme para cualquier tipo de ayuda que pudiese darles en sentido espiritual, así como en otros aspectos de la vida. Espero aumentar y ensanchar estos contactos en los próximos años."
Damos las gracias al hermano Ray Franz por ser como es, y por habernos permitido adentrarnos en su intimidad. Gracia a él, muchos de nosotros hemos llegado a perder el miedo a la libertad y a descubrir la verdadera naturaleza de la libertad cristiana. Pedimos a Dios que siga utilizando a hombres de esta clase como columnas de la verdad, la honradez y la libertad.
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